En la publicación agregan que “la joven estrella se refirió con detalle al beso que protagoniza con Rupert Grint, una de las escenas que más intriga a los seguidores de los libros de J.K. Rowling” y que “el beso entre Hermione y Ron es muy esperado, pero se estuvo formando desde hace ocho años”.
Por eso ‘descartó cualquier duda de que se trate de un gancho para captar más espectadores’. “Harry Potter no es Crepúsculo, ¿sabes? No estamos vendiendo sexo, así que cuando hay una insinuación de eso, todos se ponen muy entusiastas”.
La joven actriz reconoció que “la escena del beso con Grint fue muy extraña y que no pudo dejar de reírse junto a su compañero de reparto”.
“Pero lo hicimos, nos miramos uno al otro y dijimos, ‘Dios, esto va a ser horrible’. Pero esperemos que se vea bien”.
La parte uno de “Harry Potter and the Deathly Hallows” estará en los cines para fines de este año.
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